Beautiful Crazy

AÑO: 2009

DIRECTOR: Lee Chi-Yuan.

INT.: Angel Yao, Amiya Lee, Liao Chien-Hui.

GÉNERO: Drama.

Hace (muchos) años Taiwan era conocida entre el aficionado por sus delirantes mezclas de cine fantástico y acción. Tiempos en los que directores como Wu Kuo-Jen o Lee Tso-Nam hacían de la anarquía moneda común en un cine que mezclaba kung fu con criaturas y sorprendentes efectos especiales. Hoy, todo eso es historia. Para el aficionado de hoy, el cine taiwanés divide su producción en cine para y sobre adolescentes, cine de temática homosexual y art house de aspiraciones filoexperimentales.

Beautiful Crazy aúna esas tres corrientes, creando un mundo onírico, críptico en ocasiones, dulce en otros, pero con un panorama de imágenes y sonidos pensados para subyugar al espectador, quien no lo tiene fácil para seguir la historia de un extraño triangulo de sexo y sentimientos entre un trío de jóvenes, un pretexto para que su realizador juegue con lo que estamos viendo, con una magnifica banda sonora que nos angustia, nos desespera y nos atrapa al mismo tiempo.

Poco se sabe de este realizador, aparte de que hace un par de años firmara aquel Chocolate Rap, de factura mucho más convencional. Por lo que Beautiful Crazy deja entre ver debe haberse curtido en el mundo del videoclip, ya que cualquiera de sus planos, escogido al azar, pasaría por ser parte de un video musical.

La película de Lee Chi-Yuan está preparada para crear perplejidad, para provocar, para sorprender y para evocar. No hay que sentarse ante ella esperando narrativas convencionales si no dejándose cautivar por un universo audiovisual por el que deambulan unos personajes sin rumbo.

Lo mejor: Dejar los prejuicios a un lado, no esperar nada, y dejarse llevar.

Lo peor: Si te desesperas con el cine de Apitchapong o sueñas con masacrar a Hou Hsiao-Hsien, quizás deberías plantearte evitar a toda costa esta película.

Ayan

AÑO: 2009

DIRECTOR: Anand K.V.

INT.: Surya Sivakumar, Tamanna Bhatia, Prabhu, Akashdeep Saigal, Ponvannan, Renuka Chouhan, Koena Mitra, Karunas.

GÉNERO: Acción/Musical.

Ayan es la ganadora de la taquilla tamil este año en la India y aunque no le quita el puesto a Pokiri dentro de nuestros corazones, la verdad es que se queda bastante cerca. Surya Sivakumar protagoniza esta cinta acerca de dos grupos mafiosos enfrentados. Uno de ellos (el bueno, por decirlo de alguna manera) trafica con dvds piratas y diamantes del Congo (un lugar en el que, como todos sabemos, adoran la cumbia y el merengue), al otro no le importa mancharse las manos traficando con drogas duras.

Aunque rebosante de tópicos, lugares comunes y la previsibilidad propia del género masala del sur de la India, Ayan hace honor a sus buenos resultados comerciales ofreciendo algunos giros interesantes en el guión hacia su segunda mitad, aunque sus principales atractivos son (dejando a un lado las impresionantes localizaciones en Africa y Malasia) sus escenas de acción. Nada menos que tres directores han sido necesarios para unas extensas secuencias tan espectaculares como cualquier cosa que Hong Kong o Hollywood pueda ofrecernos. Desde el arranque por los tejados de Sudafrica usando parkour al estilo yamakasi (obra de Franz Spilhaus, que ha trabajado en cintas como Distrito 9 o Hitman) a las secuencias de stunts de coches coordinadas por William Ong (miembro del equipo de especialistas de Jackie Chan). Toda una montaña rusa de acción repartida por las casi tres horas de metraje de esta multigenérica cinta.

Lo mejor: Otro musical de acción con una historia de papel de fumar y unas escenas de acción atronadoras.

Lo peor: Desde el minuto uno somos conscientes de que todo lo que creemos que sucederá lo hará justo en el modo en el que imaginamos.

Vampire Super

AÑO: 2007

DIRECTOR: Ricky Lau.

INT.: Yuen Wah, Chin Kar-Lok, Candy Lo, Mei Lina, Zhang Guoli, Candice Chan, Liang Chao, Zhong Sihua.

GÉNERO: Comedia/Terror.

Dos años ha tardado en aparecer en Hong Kong esta supuesta comedia vampírica del director que revitalizó el género en los años 80 con la serie Mr. Vampire. A Ricky Lau vergüenza tendría que darle firmar una película como esta. Más le valdría haber seguido en Tailandia dirigiendo cintas de acción con ídolos locales que regresar a territorio chino para hacer el ridículo de esta manera. Para poner en aviso al lector recordaremos como en China está prohibido por ley cualquier contenido sobrenatural en el cine. No pueden aparecer fantasmas, monstruos o vampiros, al menos que el desenlace sea el mismo que el de los episodios de Scooby Doo. Ya podéis temblar: Vampire Super es una producción china, o lo que es lo mismo, no hay vampiros en ella.

Tal decepción sería menos si el film incluyera espectaculares secuencias de acción, un guión ingenioso o cualquier atractivo más allá de la aparición de veteranos del cine hongkonés (pésimamente doblados por voces desconocidas). Pues no, aburrimiento y desesperación son las sensaciones que el espectador experimentará durante el metraje, en el cual Yuen Wah en el papel de un militar investiga quien asesinó a su sucesor y porqué. El desenlace, en una especie de templo maldito con (falsos) vampiros saltarines logra que abramos un ojo, pero lo torpe de la coreografía marcial y la mediocre realización no tardan en eliminar toda esperanza. No merece la pena ni abusando del fast forward.

Lo mejor: Logra que Mr. Vampire 4 parezca buena.

Lo peor: Vampire Super.

Masked Rider Den-O & Decade The Movie

AÑO: 2009

DIRECTOR: Ryuta Tazaki

INT.: Dori Sakurada, Masahiro Inoue, Kimito Totani, Akina Minami, Ruka Sawaki, Rina Akayama, Kanna Mori, Takuya Mizoguchi.

GÉNERO: Ciencia-Ficción/Acción.

Parece ser que la visión de Keita Amemiya de Kamen Rider es ya historia. El director que convirtiera a Gamera en un monigote para preescolares en Gamera the Brave ha conseguido hacer lo mismo con el superhéroe insectívoro más famoso de todos los tiempos. Lejos queda el universo gótico y oscuro del motorista enmascarado, adiós a la acción violenta, al punto de vista para adultos del tokusatsu. Ahora solo nos quedan aventuras infantiles con el tren del tiempo, un reparto plagado de preadolescentes y algún detalle aislado, poca cosa. Quizá los productores se dieron cuenta que los adultos no compran juguetes, que es de lo que se trata.

La historia, confusa y de escaso interés, nos presenta a un niño que por problemas familiares ha de irse a vivir al pueblo con su abuela (como Gabai Grannie, pero con robots) y de un antiguo amuleto codiciado por unos onis (demonios tradicionales japoneses) de aspecto mecanoide. A partir de aquí viajes en el tiempo, acción blanda, efectos especiales que cantan a bajo presupuesto (que nostalgia de los homenajes a Harryhausen que siempre incluía Amemiya, un fan fatal del stop motion) y más niños que en un programa de Torrebruno. Para no dormir.

Lo mejor: Acudir a la videoteca y rescatar Kamen Rider ZO o Mechanical Violator Hakkaider. Cualquier tiempo pasado (a veces) fue mejor.

Lo peor: La infantilización progresiva de un manga de Shotaro Ishimori que no lo era en absoluto.