AÑO: 2010
DIRECTOR: Oxide Pang, Danny Pang
INT.: Shawn Yue, Rainie Yang, Elanne Kong, Gordon Lam, Jo Koo, Ciwi Lam, Lam Sze-Man, Jones Xu.
GÉNERO: Terror.
Los Pang han pasado en pocos años de ser los directores revelación del cine hongkonés a unos tipos que se dedican a los refritos. Esta innecesaria secuela de la saga The Eye tiene como único objetivo intentar arrancar algunos centimos de distribuidores internacionales gracias a añadir el gimmick de la tercera dimensión a un subgénero fantasmal más que agotado.
En una Tailandia marcada por las turbulencias políticas, un grupo de turistas hongkoneses quedan atrapados en un hotel de mala muerte con la compañía de los espectros de turno. Una de las chicas del grupo comienza a tener extrañas visiones.
Lo dicho: más de lo mismo. Hay que ser realmente sugestionable para que estas cosas te produzcan el mínimo efecto (reitero que jamás de los jamases una cinta de terror asiático ha provocado el menor espasmo muscular en mí, ni cuando hacen el viejo truco del susto a todo volumen) y más cuando todo lo que aquí aparece ya lo hemos visto antes. La única novedad son las balas, manos, moscas y otros objetos lanzados al público en 3D. Para los que lo vemos en el home cinema, ni eso.
Lo mejor: Que a ratos llega a parecer una comedia, aunque tampoco tengo claro si esa era la intención de los Pang.
Lo peor: Que es hora de dar un paso adelante y olvidarse de los amigos enfadados de Casper.
Made in China 
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