Amalfi: Rewards of the Goddess

AÑO: 2009

DIRECTOR: Hiroshi Nishitani.

INT.: Yuji Oda, Yuki Amami, Erika Toda, Koichi Sato, Nene Ohtsuka, Ugo de Cesare, Akira Onodera, Mitsuru Hirata.

GÉNERO: Thriller.

La cosecha de thrillers japoneses de estos últimos años está resultando más que provechosa. Amalfi no es una excepción, si bien es el más arriesgado de todos ellos: una superproducción rodada integramente en Italia (en régimen de coproducción) con un misterio que oculta una venganza, un despliegue de escenarios turísticos dignos de un documental del National Geografic, un buen reparto, y una magnífica banda sonora de Yugo Kanno (Shinzanmono).

Todo comienza con una delegación diplomática de seguridad desplazados a Roma para una cumbre del G-8 a la que asiste el primer ministro japonés. Uno de los hombres clave del equipo se ve accidentalmente envuelto en el secuestro de una niña, hija de una ciudadana japonesa. A partir de ese momento empezará a tirar del hilo y a descubrir que la cosa no era tan sencilla como parecía en un principio.

La película saca buen partido de las localizaciones en Roma y Amalfi (cerca de Nápoles), todo el mundo habla un perfecto italiano (incluido Yuji Oda) y Sarah Brightman hace un extenso cameo interpretándose a sí misma.

Muy recomendable para italófilos que gusten del cine nipón (y viceversa).

Lo mejor: Una historia llena de sorpresas, así como un disfrute audiovisual.

Lo peor: Sarah Brightman pronuncia peor el italiano que Yuji Oda.

Legend of the Aroma City

AÑO: 2011

DIRECTORES: Chen Mingxin, Anthony Xu

INT.: Athena Chu, Zhaxi Dunzhu, Waise Lee, Cheung Tat-Ming, Dong Lifan, Natalie, Jing Gangshan, Zhongyong Zhijoma.

GÉNERO: Thriller romántico.

Esta historia romántica con leves elementos fantásticos tiene algunos puntos en común con Ganglamedo, aunque su visión comercial la aleja bastante del film tibetano de Dai Wei, lo cual no es especialmente malo cuando se hacen bien las cosas.

Athena Chu (con enormes lentillas y orejas élficas) es al última espécimen sobre la tierra de una raza mística que se comunican mediante el canto y sus cuerpos emiten unos irresistibles perfumes. La joven, que creció junto a un ya difunto sacerdote católico en las montañas, conocerá al hijo de un mafioso, perseguido por los enemigos de su padre.

Con 39 años, la protagonista femenina de Shaolin Popey sigue igual de atractiva y juvenil, perfecta en un papel que pedía a gritos una imagen de inocencia en la pantalla, sin desentonar con su partenaire masculino, de veintitantos años de edad. Junto a ellos, dos eternos secundarios del cine de Hong Kong, Waise Lee (con peluquín y también rejuvenecido) y un Cheung Tat-Ming que, al contrario que sus colegas, parece mayor de lo que realmente es.

La cinta tiene romance, aventura, emoción, unos cuantos tiros y una bonita banda sonora. Mucho mejor de lo que me esperaba.

Lo mejor: Es entretenida, y no abusa de la excitación lacrimal.

Lo peor: Waise Lee es un gangster con un comportamiento un tanto ilógico.

Yakuza Weapon

AÑO: 2011

DIRECTORES: Tak Sakaguchi, Yudai Yamaguchi

INT.: Tak Sakaguchi, Shingo Tsurumi, Mei Kurokawa, Takashi Nishina, Akihiko Sai, Arata Yamanaka, Jun Murakami.

GÉNERO: Acción/Fantástica.

El despiporre. Sexo, violencia y artes marciales. Y todo en cantidades industriales. Esta producción de los chalados del Sushi Typhoon adapta un manga de Ken Ichikawa (el sidekick de Go Nagai en Dinamic Planning, coautor de Getter Robo, Mazinger Z o Cutey Honey) sobre un yakuza al que le implantan componentes de cyborg, convirtiéndole en una máquina de matar.

En esta película todo está aún más al límite de lo acostumbrado, demostrando una sacrosanta fidelidad a su origen impreso, dando como resultado un genuino dibujo animado en imágenes reales.

Los ingredientes son los habituales de la productora: efectos gore de Nishimura y su equipo, humor absurdo, sexo retorcido y, en esta ocasión, una buena dosis de kung fu gracias a Tak Sakaguchi (Versus) que codirige e interpreta al desquiciado protagonista. Atención al enorme plano secuencia de peleas y stunts: nada que envidiar a Tony Jaa en Thai Dragon.

Lo mejor: Una de las mejores cintas de la productora.

Lo peor: Nada, a menos que tu película favorita sea Yentl.

Horny House of Horrors: Fashion Hell

AÑO: 2010

DIRECTOR: Jun Tsugita

INT.: Miho Arai, Asami, Saori Hara, Yuya Ishikawa, Wani Kansai, Akira Murota, Takashi Nishina, Demo Tanaka.

GÉNERO: Comedia/Terror/Erótica.

Horny House of Horrors puede tener un presupuesto mínimo, menos decorados que Los Roper y un argumento pasado de rosca, pero por extraño que parezca resulta un delirante divertimento con un aire a aquellas comedias de terror que alquilábamos durante los 80.

La historia se centra en un burdel donde todos sus clientes son castrados por las meretrices que allí trabajan (incluida una Asami que pega unos puñetazos que ni George Foreman) para goce y deleite de un misterioso personaje que nadie conoce personalmente.

Aún con más de un chiste de sal gruesa que no aceptarían ni en la quinta entrega de Torrente, la película atrapa en su sencillo argumento, basando su principal atractivo en un reparto de rostros conocidos del género, los efectos especiales del maestro Nishimura y el despelote continuo de sus starlettes.

Lo mejor: Diversión de serie Z con litros de sangre a borbotones.

Lo peor: Los créditos finales con la bossa nova piden a gritos algo más cañero.

Kunoichi

AÑO: 2011.

DIRECTOR: Seiji Chiba.

INT.: Rina Takeda, Mayu Onomura, Shiho Fujisawa, Kotono, Mitsuki Koga, Masanori Mimoto, Yuichi Sato, Kentaro Shimazu.

GÉNERO: Drama/Acción.

Después de Alien vs Ninja los fans de Seiji Chiba esperábamos ansiosamente su nueva película, una cinta de ninjas que prometía acción a destajo. Si bien no es un producto desdeñable, Kunoichi se encuentra lejos de lo esperado.

La película comienza con cuatro chicas secuestradas por un clan rival que van a ser entregadas para disfrute de las tropas ninja, que no tienen acceso a las mujeres de su pueblo, reservadas a las clases altas. Entre las presas hay una peligrosa ninja que echará por tierra los planes de sus enemigos.

Rina Takeda lucha tan increíble como en High Kick Girl y las peleas son trepidantes y con unas coreografías excelentes. Lo malo es que la acción no empieza hasta la mitad justa del film (que dura poco más de una hora) y las tres secuencias de acción saben a poco.

Kunoichi tiene el aspecto de haber sido un experimento barato del director. No solo está rodada en las mismas localizaciones de Alien vs Ninja, sino que Chiba parece más interesado en jugar con la narración paralela que en demostrar lo buen director de acción que es.

Lo mejor: Rina Takeda, que ya tarda en hacer una peli con Jiang Luxia y JeeJa Yanin en plan Los Ángeles de Charlie.

Lo peor: Si la ves solo por la acción deberás tener un poco de paciencia.

Paranormal Activity 2: Tokyo Night

AÑO: 2010

DIRECTOR: Toshizaku Nagae.

INT.: Aoi Nakamura, Noriko Aoyama.

GÉNERO: Terror.

En fin, desconozco a quién pueden dar miedo estas estupideces. Si ya el cine de fantasmas me parece una soberana patochada inductora de narcolépsia profunda, estas de los críos con la cámara en mano son para mear y no echar gota.

Esta secuela japonesa, auspiciada por los creadores de la original, ofrece un segundo plato de lo mismo. Un par de hermanos en su casa que escuchan ruidos, los cristales se rompen, los objetos se mueven… Lo de costumbre. La única variante aquí es que comen con palillos y que llaman a un monje sintoísta para que exorcice la habitación maldita. Todo lo demás es pura rutina.

Si la película durara 20 minutos podría resultar hasta graciosa (o si sus creadores tuvieran un poco de sentido del humor o imaginación) pero cuando empiezan las distracciones nocturnas, la cinta entra en un progresivo estado de tedio, tontería y pelos largos. Ah, existe otra segunda parte hecha en los USA, por si alguien se ha quedado con ganas de más.

Lo mejor: Hacer como que no existe.

Lo peor: Lo condenadamente larga y aburrida que se hace.

 

Unfair, the movie

AÑO: 2007

DIRECTOR: Yoshinori Kobayashi

INT.: Ryoko Shinohara, Kippei Shiina, Hiroki Narimiya, Sadao Abe, Mari Hamada, Rosa Kato, Mion Mukaichi, Masaya Kato.

GÉNERO: Thriller.

Por lo que se dice, Unfair fue una de las series revelación de la tele japonesa durante el año 2006. Una serie policiaca con protagonista femenina basada en una serie de novelas de misterio. Tras la serie se realizó un telefilme especial y un largometraje para cine, que es el que nos ocupa, tan televisivo como el resto de sus parientes.

La premisa es tan interesante como poco original: unos terroristas de élite que secuestran un hospital y amenazan con causar una hecatombe bacteriológica haciendo explosionar una bomba. Dentro del hospital, la hija de la protagonista, una cría de 8 años que se ha quedado ciega (temporalmente) a causa de un atentado. Todas las fuerzas policiales parecen tenerle manía a la decidida heroína, que finalmente tendrá que sacar las castañas del fuego y recuperar a su hija.

Aunque técnicamente es impecable (es una producción de la Toho) la fotografía resulta un tanto televisiva, como en los V-Cinema de yakuzas y ninjas nudistas. Tampoco es lo peor. Más grave es la carencia de acción, el metraje alargado, y la completa previsibilidad argumental. Eso sí que es para cabrearse.

Lo mejor: Un producto convencional para los que suelen matar las horas viendo cosas como Walker Texas Rangers y otros especímenes televisivos.

Lo peor: Es como Hardboiled, pero con una infinitésima parte de la acción.

Super Lady Zero

AÑO: 2010

DIRECTOR: Ginta Jinji.

INT.: Ichika Aimi, Nanako Misaki,  Kamo Negisawa, Mr. O, Tony Ohki.

GÉNERO: Ciencia-Ficción/Porno.

Otra Supergirl japonesa (en realidad, una secuela de Super Lady que recicla el traje de la otra) en otra infraproducción que juega a mezclar cine fantástico con marranadas. Media hora les dura el ataque cinéfilo, lo justo para introducir la historia de una profesora treintañera que en realidad es la mujer de acero. Su amiguita se terminará convirtiendo también en ciudadana de Kripton cuando el vibrador que habla, el Joker, el increíble Hulk con cabezón raro y el enmascarado del kimono empiecen a hacer de las suyas.

Esta vez no hay mucha acción. Lo que se han ahorrado en eso se lo gastan en unos efectos especiales inauditos; hay un par de planos a lo Kung Fu-Sión de puro delirio, aparte de la lucha bajo la lluvia encima del rascacielos perdido en el océano.

A partir del minuto 30, vuelve el festival de las torturas (bajo los efectos de la kriptonita) con la milf como protagonista, y cuando aparece la jovencita, ñaka, empieza el porno duro. Qué cosas tiene uno que ver.

Lo mejor: Esos efectos especiales. Quiero arrancarme los ojos.

Lo peor: Dos horas son muchas horas para ocuparlas en estos espantos.